Por el placer de estar juntas hacemos juegos con palabras. Nos reunimos una vez por semana y entre café y cosas ricas, creamos letras en libertad.

sábado, 30 de agosto de 2008

...Acerca del amor...



Digresiones de un grupo de mujeres acerca del “amor” en una apacible tarde de otoño…


Todo comenzó con el reiterativo lamento de lo difícil que resulta encontrar un amor, que además perdure…
Al momento comenzamos a hablar todas a la vez. Luego, a su tiempo, algunas se expresaron a gusto.
La veterana enunció una gama variada de amores, generando dudas sobre la veracidad de aquellos.
Confesó haber tenido amores tempestuosos, serenos, clandestinos, breves, interminables. Alguno tan pesado que costó mucho deshacerse de él. Otro tan light como un yogurt.
La morocha, con irónica sonrisa, y enarcando las cejas soltó: A mí me pierden los hombres intelectuales, profundos, inteligentes… Especie totalmente en extinción, por tal motivo me encuentro sola.
Las miradas se dirigieron a la flaca Sonia, que levantando su dedo pedagógico dijo: Los sentimientos, la pasión, el amor, todas las sensaciones que te perturban, incluso el placer físico necesitan un componente vital, que no hay que olvidar, el estado financiero del candidato. No es igual un amor en Palma de Mallorca, que en ¡González Catán!
Soledad concluyó que su experiencia personal no servía como ejemplo, ya que cada una ama o deja de hacerlo por múltiples razones, que carecen de explicación racional.
Ahí, remató la veterana: Para definir el amor puede utilizarse un bosque de palabras.
Pero creo que es perfecta la definición “Un amor a cuerda”. Significa mantenerlo en acción en forma constante.
Tensar la cuerda, darle cuerda, aflojar la cuerda, y esperar que tenga cuerda para rato…



© Lidia A. González

® Birlibirloque

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Abuela nos encantó tu cuento! Sos una genia! Vamos a estar esperando las próximas publicaciones.
Te queremos!!
Sofi y San.

Birlibirloqueras dijo...

Sofi y Sandrita:
birlibirloqueras te dan las gracias
por el comentario a la querida Lidia.
Ocho grandes abrazos.

Anónimo dijo...

¡Felicitaciones! Muy buena síntesis sobre una escena que es frecuente en charlas distendidas. Y uno de los grandes temas de la vida, rematado con excelente ironía y humor.
Un abrazo.
Pablo Lepiane.

Birlibirloqueras dijo...

Te retribuimos el abrazo con ocho grandes.
Gracias por tu comentario.

claraaaa dijo...

HHHHHOOOLLLAAAA ABBBBBBBBBUUUUUUUUU!!!!!!
me encanta tu cuentooooo
sos lo mas espero que lo publiquessss!!!! besitos claruu

Birlibirloqueras dijo...

Gracias Clara, por tu visita y comentario.
Ocho grandes abrazos.